Los materiales no tejidos, utilizados en diversas aplicaciones, incluidas las toallitas húmedas , están compuestos de fibras que están unidas entre sí de forma no tejida. La composición de los materiales no tejidos puede variar según el proceso de fabricación y las propiedades deseadas del producto final. A continuación se muestran algunos materiales comunes utilizados en la composición de telas no tejidas:
1. Fibras sintéticas: Las telas no tejidas suelen incorporar fibras sintéticas debido a su versatilidad, durabilidad y facilidad de producción. El poliéster y el polipropileno son fibras sintéticas de uso común. Son fuertes, livianos y resistentes a la humedad y a los productos químicos, lo que los hace adecuados para diversas aplicaciones.
2. Fibras naturales: Los materiales no tejidos también pueden incluir fibras naturales como algodón, lana o celulosa (de pulpa de madera). Las fibras naturales pueden ofrecer diversas propiedades como suavidad, absorción de humedad y transpirabilidad, según la fibra específica utilizada.
3. Aglutinantes: para lograr cohesión y garantizar que las fibras estén unidas entre sí, los materiales no tejidos pueden contener aglutinantes. Estos aglutinantes pueden ser polímeros termoplásticos o aditivos como adhesivos, resinas o látex. Ayudan a estabilizar la estructura fibrosa del tejido no tejido.
4. Aditivos: Los materiales no tejidos podrán incorporar aditivos para potenciar o modificar sus propiedades. Ejemplos de aditivos incluyen agentes antimicrobianos, retardantes de llama, estabilizadores UV o tintes que proporcionan funcionalidades o cualidades estéticas específicas.
El proceso de fabricación de telas no tejidas puede implicar técnicas como spunbond, meltblown, punzonado con aguja o airlaid, que afectan la disposición y unión de las fibras y, por lo tanto, influyen en las propiedades finales del material no tejido. Estas técnicas determinan factores como la resistencia, el grosor, la suavidad, la absorbencia o la eficiencia de filtración del tejido.
Es importante tener en cuenta que la composición de los materiales no tejidos puede variar significativamente según la aplicación específica y el fabricante. La elección de fibras, aglutinantes y aditivos está determinada por las características deseadas y los requisitos de rendimiento del producto final.